Voy a empezar una serie, intercalada con otro tipo de artículos, sobre consejos y programas para proteger cada uno de los elementos más relevantes de un sistema informático.
Parece obligado comenzar por el elemento que es el primero que recibe la información de nuestro proveedor de internet (ISP) y el último que la envía: hablamos, como es obvio, del router.
Este dispositivo nos lo suele vender o alquilar nuestro ISP, no pudiendo en casi ningún caso sustituirlo por otro comprado aparte por nosotros. Eso sí, a continuación suyo (conectado a él) podemos poner otro para diversos propósitos que no son el objeto de este artículo.
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